¿Sabías que muchas personas con discapacidad no acceden a ayudas o recursos simplemente porque no han realizado la solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad?
Este trámite, que puede parecer burocrático o complejo, es en realidad la puerta de entrada a derechos, servicios, beneficios económicos, educativos, laborales y sociales. Y lo más importante: es un paso fundamental para que se reconozca tu realidad y tus necesidades.
En este artículo te explicamos qué es, para qué sirve y cómo se realiza la solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad. Porque si hay algo que tenemos claro en ASPRONA, es que la información es poder… y también inclusión.
¿Qué es el reconocimiento del grado de discapacidad?
Es un procedimiento oficial mediante el cual la Administración evalúa la situación de una persona y determina su grado de discapacidad en un porcentaje que va del 0% al 100%.
A partir del 33% se considera que existe una discapacidad reconocida oficialmente, lo que da acceso a una serie de medidas de apoyo.
Esta evaluación se basa en informes médicos, psicológicos y sociales, y tiene en cuenta tanto las limitaciones físicas, sensoriales, mentales o intelectuales como las barreras del entorno.
¿Para qué sirve la solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad?
Muchas veces se desconoce que este simple trámite puede abrir la puerta a derechos esenciales, como:
Acceso a programas de inserción laboral específicos.
Adaptaciones escolares o educativas.
Bonificaciones fiscales.
Prestaciones económicas (como el complemento de ayuda a la infancia).
Plazas reservadas en oposiciones o empleo público.
Tarjetas de aparcamiento para personas con movilidad reducida.
Prioridad en el acceso a recursos sociales y sanitarios.
Acceso a centros de día, residencias o apoyos específicos.
En resumen: la solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad permite que el sistema te vea, te escuche y te apoye. Sin ese reconocimiento, muchas puertas siguen cerradas.
¿Quién puede realizar la solicitud?
Cualquier persona con una condición física, sensorial, intelectual o mental que le genere dificultades en su vida diaria puede iniciar la solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad.
También puede hacerlo un representante legal o tutor, en caso de menores o personas con medidas de apoyo.
No importa la edad: desde niños hasta personas mayores pueden beneficiarse de este procedimiento.
¿Dónde se presenta la solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad?
Depende de tu comunidad autónoma, pero en general se tramita a través de los servicios sociales o centros base de tu localidad.
Puedes informarte en la web oficial de tu comunidad, donde normalmente encontrarás el formulario para iniciar la solicitud y la dirección de entrega.
Algunas comunidades ya permiten realizar la solicitud de forma telemática, lo que facilita el proceso.
¿Qué documentación necesitas?
La solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad debe ir acompañada de:
Fotocopia del DNI/NIE.
Informe médico actualizado.
Informes psicológicos, educativos o sociales (si los hay).
Formulario de solicitud cumplimentado.
Documentación legal si se trata de un representante o tutor.
Cuanta más información se aporte, más precisa será la valoración. No tengas miedo de detallar cómo afecta tu situación a tu día a día.
¿Cómo es el proceso de valoración?
Una vez presentada la solicitud, te citarán en un equipo de valoración y orientación (EVO). Este equipo multidisciplinar (normalmente con personal médico, psicológico y social) te realizará una entrevista y revisará la documentación.
En función de las limitaciones que se detecten, se asignará un grado de discapacidad en porcentaje. Este grado puede ser:
Menor del 33% → No se reconoce discapacidad oficial.
Entre el 33% y el 64% → Discapacidad moderada.
Entre el 65% y el 74% → Discapacidad severa.
A partir del 75% → Discapacidad muy grave.
El resultado se comunica por escrito en una resolución administrativa, normalmente en un plazo de 2 a 6 meses desde la valoración.
¿Y si no estoy de acuerdo con el resultado?
Puedes presentar una reclamación o recurso si consideras que el grado asignado no refleja tu situación real.
Para ello, es fundamental contar con nuevos informes médicos o sociales que respalden tu reclamación.
En ASPRONA, si lo necesitas, podemos ayudarte a interpretar tu resolución y valorar los pasos a seguir.
¿El reconocimiento es para siempre?
No siempre. En la resolución te indicarán si el reconocimiento es:
Permanente: si la situación no es previsible que cambie.
Revisable: si hay posibilidad de mejoría o evolución. En ese caso se indica una fecha de revisión.
Además, tú puedes solicitar una revisión por agravamiento si tu situación ha empeorado y necesitas más apoyos.
¿Por qué tantas personas no hacen la solicitud?
Por desconocimiento, miedo o la falsa idea de que «eso no es para mí». Pero la realidad es que la solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad no te quita nada… y puede darte mucho.
No se trata de etiquetar, sino de proteger. De reconocer. De apoyar. De garantizar que nadie quede fuera del sistema por no encajar en los moldes.
¿Cómo puede ayudarte ASPRONA?
Desde ASPRONA llevamos décadas acompañando a personas y familias en el proceso de solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad.
Te ayudamos a:
Reunir la documentación necesaria.
Entender los trámites y plazos.
Prepararte para la entrevista de valoración.
Solicitar revisión si no estás conforme con el resultado.
Porque sabemos que a veces lo más difícil no es el papel, sino dar el paso.
¿Y ahora qué?
Ahora que ya sabes qué es la solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad, para qué sirve y cómo se tramita, solo queda una cosa: pasar a la acción.
Si tú o alguien de tu entorno lo necesita, no lo dejes pasar.
Solicitar este reconocimiento puede cambiar tu vida.
Y si tienes dudas, estamos aquí para ayudarte.
Contacta con ASPRONA y empieza hoy mismo. Porque tus derechos no pueden esperar.